El Emprendimiento En Tres Tiempos De Crisis.
Publicado por Edgar Walter el 13/04/2020. Categoría: Blog
La inteligencia ha sido en todos los tiempos la reina
del mundo y ha vencido las preocupaciones.
Larra
Ante un futuro incierto desde el punto de vista del hoy y el ahora, es necesario conjugar varios tiempos: pasado, presente y futuro. Si meditamos sobre ellos, encontraremos la entereza para salir fortalecidos de este momento difícil en que estamos los emprendedores.
De lo primero que debes ocuparte es del presente. De nada vale que llores por las glorias pasadas o sueñes un glorioso porvenir. Además de ser soñadores, los emprendedores tenemos que ser pragmáticos: es necesario actuar rápido y actuar bien, según las disposiciones de aquellos que tienen más conocimientos que nosotros.
No hay que cuestionarse las orientaciones de los medios autorizados: si te piden que permanezcas en casa y hagas distanciamiento social, que extremes las medidas de higiene y que cuides tu salud, obedece. Ten en cuenta que tu salud y la de los tuyos es lo fundamental y que de momento estás limitado en lo que puedes hacer.
Si puedes utilizar este “tiempo fuera” para cosas igual de importantes y que has ido postergando por años. El simple hecho de pasar más tiempo con tu familia es una de ellas. Aumentar tu formación profesional es otra. Dedicar un tiempo a reflexionar sobre tu pasado y tu futuro es otra, pero enfocándote en lo positivo.
Reflexionando al pasado
No es el recuento de todo el esfuerzo, tiempo y dinero que has empleado para que la pandemia, de golpe y plumazo, te haga zozobrar. De hecho, da las gracias de que solo una catástrofe de estas épicas proporciones, que hunde los cimientos de las economías más fuertes del mundo, sea la causante de que tu emprendimiento se desacelere.
Antes de la pandemia emprendí varios negocios fuera de mi zona de confort, fuera del mundo de la gastronomía (y también algunos dentro de él) y resultó en descalabro. Porque emprender es arriesgar, y no siempre podemos resultar vencedores ni tener en la mano la idea ganadora. O la idea era buena, pero no había llegado su momento. O cometí errores de los cuales saqué enseñanza.
Así que no te apenes si hoy, en esta coyuntura de la pandemia, tu negocio está en aprietos. Considera que todo el camino que recorriste hasta tener lo que emprendiste es un sendero adelantado que puedes emplear para ser mejor en el futuro. El mundo necesitará de personas preparadas y valientes, que tendrán nuevas oportunidades en una nueva economía global.
Reflexionando hacia el futuro
El futuro, de momento, permanece flotando en la incertidumbre. Una cosa si es definitiva: la tormenta pasará. Ni siquiera ha sido la peor que ha enfrentado la humanidad.
Las plagas surgen de forma cíclica debido a factores demográficos que extienden su contagio. La velocidad con que una persona puede moverse hoy en el mundo es grandísima, y esa ha sido la triste carta de triunfo del coronavirus. Es por ello que se nos exige que restrinjamos nuestros movimientos, y si somos pacientes y disciplinados el virus morirá si le damos tiempo y dejamos que la naturaleza siga su curso.
Después vendrá la tarea de recuperarnos. Cosa que no me cabe duda que hagamos. Hay una máxima que reza que lo que no me mata, me hace más fuerte y, por triste que sean las bajas de esta guerra innatural, en un final saldremos adelante.
Por ello, no es momento de pensar en futuros apocalípticos ni insalvables. Es tiempo de aferrarnos a uno de nuestras principales virtudes como hombres de negocios: nuestra autoestima. Es tiempo de usar el período de aparente inactividad en trazar planes y estrategias para el futuro, porque esto no es un simple ejercicio mental: cualquier plan de acción que nos tracemos nos preparará para una contingencia futura… porque ya la vida nos ha demostrado que, literalmente, cualquier cosa puede suceder.
Así que utiliza tu tiempo en casa de forma productiva. Con tanto que hacer en el futuro, puede que no puedas descansar así en largo tiempo.